Podcast “La filosofía no sirve para nada”
Páginal principal Colaboradores Lista de episodios emitidos Lista de croquetas emitidas Temas de los que hablamos Cómo hacemos el podcast Información para colaboradores Calendario
Mohism: The Ten Mohist Doctrines
Social and Political Thought in Chinese Philosophy: The Neo-Confucian Era
Confucius: Confucius as Chinese Philosopher and Symbol of Traditional Culture
¿Quién las inventó? ¿Hace cuánto tiempo? Para contar mejor la historia de las oposiciones deberemos viajar a la época de antes del nacimiento de Cristo y a la zona oriental, concretamente al imperio chino. Son ellos quienes inventaron los conceptos de funcionarios y oposiciones.
Referencias
Legalism in Chinese Philosophy: 4. Maintaining the Bureaucracy
Aspectos filosóficos
https://www.conectaoposiciones.es/la-historia-de-las-oposiciones-en-espana/
Platón clasifica la sociedad ideal que plantea en República en tres clases sociales / castas en la que conecta lo macro y lo micro: si gobierna el bueno su bondad individual se convertirá en social y la sociedad será mejor porque la persona que gobierna es mejor
Las tres categorías de persona se deben a tres tipos de alma y, por tanto, podríamos tener tres tipos de sociedad. Para Platón (mito del auriga que guía dos caballos) el alma racional debe tener bajo control a las otras dos: la irascible y la concupiscible.
Juan Carlos en su artículo Oposición rima en consolante con Inquisición explica las castas (niveles) de la sociedad funcionarial y podemos ver que, respecto a los informáticos, es una sociedad estructurada bastante platónicamente:
En todos los colectivos profesionales el perfil técnico es propio de los niveles inferiores y para ascender a niveles directivos hay que reconvertirse en gestores.
En este ascenso desde niveles técnicos a niveles de gestión se suele ver con frecuencia en acción el principio de Peter: “En una jerarquía, todo empleado tiende a ascender hasta su nivel de incompetencia”.
¿Los niveles superiores se reservan el “derecho a pensar”?
Sistemas de jerarquía social muy unificados en los que se aplica la lógica platónica de que la racionalidad mental es una habilidad superior y la razón práctica es una habilidad inferior.
Las funciones de creación de orden social están relegadas a la esfera racional mental.
Los sistemas políticos son sistemas racionales competitivos, un duelo de racionalidades, especialmente en el ámbito de los partidos políticos.
Lo técnico debe de salir de la reclusión a la que la someten “los que piensan”. Lo técnico debe ser político.
Las prácticas técnicas suelen ser colaborativas, especialmente en el mundo del desarrollo de software.
El sector técnico ha elaborado una ética, la Ética Hacker que tiene componentes racionales pero motivaciones emocionales: - “se dedican a programar de manera apasionada” - “creen que es un deber para ellos compartir la información” - “la ética hacker es una nueva moral que desafía la ética protestante del trabajo” - “se funda en el valor de la creatividad” - “consiste en combinar la pasión con la libertad”
Se tiende a emborronar el valor de dicha ética publicitando los delitos cometidos por “hackers” manchando la reputación del colectivo
El mundo de los “makers” (comunidades de “manitas” orientados por la ética hacker) desafía los sistemas comerciales mediante fomentar la apropiación de los objetos en comunidades colaborativas
Si vivimos en una sociedad movida por algoritmos y datos, un punto de vista crítico y escéptico acerca de las tecnologías mismas es más potente que una simple “caricia ética” sobre los fines desde la filosofía.
Escenarios:
Fácilmente convertible en una prueba de grupo
La idea sería demostrar mediante una crítica un profundo conocimiento tanto de la técnica como de la legislación aplicable, planteando alternativas a un problema ya resuelto y su viabilidad, tanto técnica como legal, como también se pide ahora.
Se puede ampliar con una simulación de una disputatio en grupo que no trataría de demostrar quién sabe más sino la capacidad de argumentar y de trabajar en grupo
De la práctica diaria surge el escepticismo hacia aquello que solo funciona sobre el papel o que es muy complejo de mantener en la práctica. El famoso dilema entre teoría y práctica. “Los que hacen” tienen mejor artillería teórica (en el caso de los desarrolladores de software, por ejemplo) que “los que piensan”.
¿Por qué en la defensa ante el tribunal no puedes adoptar una actitud escéptica respecto de las tecnologías?
Schopenhauer introdujo en su obra magna un apéndice criticando en enfoque Kantiano y salvando algunas cosas encima de las cuales él construía su propuesta
El llamado ENI (Esquema Nacional de Interoperabilidad, Real Decreto 4/2010) no hace ninguna mención de evitar la complejidad tecnológica (solo menciona la complejidad organizativa). Sus valores son muy buenos: compartir, reutilizar, colaborar. Pero faltaría una apuesta por huir de la sobreingeniería y la complejidad innecesaria. Y ya hemos hablado que la complejidad innecesaria está en la base de muchos problemas de seguridad. ¿Podría un opositor defender estos valores ante un tribunal?